En algún punto de nuestra etapa vital, todas las personas nos encontramos atravesando un duelo por la pérdida de un ser querido. Es una de las etapas más tristes por las que tenemos que pasar las personas, pero forma parte del proceso de despedida. Es decir, el duelo es la forma en la que las personas nos despedimos de alguien a quién hemos querido mucho y que ya no está con nosotros. El duelo siempre se da por una pérdida, aunque no siempre tiene que ver con el fallecimiento de la persona como tal. En algunas ocasiones, el duelo se da cuando nos separamos sentimentalmente de una persona con la que hemos compartido una etapa de nuestra vida. Es decir, cuando se ha dado una ruptura amorosa.
El duelo cuenta con unas fases o etapas conocidas que no necesariamente tienen que producirse en orden. Algunas se suceden a la vez, otras se pasan muy por alto y otras duran más tiempo del esperado. Es importante recordar que no hay tiempos establecidos cuando hablamos de duelo. No existen protocolos, ni ritmos. Debemos dejar que la persona que lo está viviendo vaya atravesando todas sus etapas y aprendiendo a despedirse de su ser querido.
La terapia EMDR y el proceso de duelo
El proceso de duelo es un camino complicado que comienza en el mismo momento en que perdemos a un ser querido y termina cuando comenzamos a retomar nuestra vida con normalidad. Hay veces en que las personas no pueden por si mismas afrontar el dolor de la pérdida, especialmente en situaciones en las que esta ha sido traumática para el paciente.
En concreto, la terapia EMDR sirve para ayudar al paciente a superar esas imágenes traumáticas y a procesarlas. Cuando un duelo está acompañado por la incapacidad de procesar un trauma asociado, existen más probabilidades de que se termine complicando.
Muchos estudios psicológicos han afirmado que los traumas son informaciones almacenadas en nuestro cerebro de forma disfuncional. No se integran con nuestra vida cotidiana y nos hace sentir emociones como tristeza, ira, miedo…al recodarlas.
Saber procesar los traumas relacionados con el duelo es difícil y, en muchas ocasiones, se necesita de ayuda profesional para poder procesar los sentimientos y emociones que estamos viviendo. Por eso mismo, lo que se busca aplicando la terapia EMDR en el proceso de duelo es acompañar al paciente y ayudarte a procesar el trauma relacionado con la pérdida del ser querido, ya sea por ruptura o por fallecimiento.
¿Cuáles son las técnicas usadas en EMDR?
En la psicología con terapia EMDR, se llevan a cabo diferentes técnicas para ayudar al paciente a atravesar la etapa del duelo. Estas son:
- Movimientos oculares horizontales: Estos son una serie de movimientos que el terapeuta hace con los dedos dentro del campo visual del paciente. Durante este proceso se le ayuda a procesar las imágenes traumáticas mientras tiene toda la atención concentrada en un estímulo externo.
- Estimulación bilateral auditiva: En esta técnica el terapeuta se ayudará de la música para ayudar al paciente a procesar el trauma. Esto quiere decir que la música ayuda a activar los dos hemisferios del cerebro y a conectarlos entre sí, lo que ayuda a procesar el trauma.
- Tapping: Es una de las técnicas de EMDR más comúnmente conocida. Lo que se busca con esta técnica, al igual que con las anteriores, es estimular los dos hemisferios del cerebro mientras el trauma está pasando por nuestra mente.
La terapia busca a través del EMDR ayudar al paciente a afrontar el trauma relacionado con el duelo. De esta manera, será más fácil gestionar y abordar esta etapa y evitar que se complique. Afrontar este proceso cuando perdemos a un ser querido es completamente normal y necesario para despedirnos y aprender a vivir de nuevo sin la compañía de esa persona. Por eso, la terapia puede acompañarnos en el duelo y ayudarnos.
Si quieres saber más sobre cómo funcionan las técnicas de EMDR para ayudarnos a superar los traumas que se suceden en nuestro cerebro, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Desde Psicología Conde Orgaz estamos aquí para ayudarte y acompañarte.